Cuando tenemos una huerta, ya sea para uso personal o con una utilidad comercial, son…
En las plantaciones pueden darse varios problemas, como el de algunas plagas ya mencionadas en otros artículos. Dado que éstas pueden echar a perder la cosecha, lo más idóneo es conocerlas bien. Hoy, desde BeniPlast / BeniTex, queremos recordaros una de ellas: La mosca blanca.
Esta plaga es fácil de identificar por su color y porque la planta a la que atacan, presentará signos de su paso. En este caso, lo más habitual es que nos encontremos con un tono amarillento debido a las picaduras. No obstante, lo más relevante es su principal consecuencia: La melaza que segregan, que puede suponer la aparición de hongos y bacterias que intoxican a la planta.
La mosca blanca la podemos encontrar, sobre todo, en la parte posterior de la hojas, por lo que, al agitar la planta, éstas volarían a su alrededor. Para poder eliminarla, es probable que encontremos dificultades, por lo que antes de eso lo más idóneo es que hagáis una prevención. En este caso lo mejor es sembrar en la temporada adecuada, regando cuando se corresponde y contando con una malla anti-insectos.
Sin embargo, si los cultivos ya tienen la plaga, hay que recurrir a trampas cromáticas. Éstas consisten en adhesivos de colores que les llamarán la atención y que harán que se queden las moscas pegadas. De igual forma, el jabón potásico puede ser una solución para debilitarlas, sobre todo si se combinan con aceite de neem.