3rd diciembre, 2020
Como ya os comentamos en nuestro anterior post, el viento puede ser en parte dañino par los cultivos por ello, hoy desde BeniPlast / BeniTex, queremos hablaros de las barreras cortavientos o rompevientos biológicos (árboles, arbustos, hierbas) y no biológicos (mamparas, paredes, empalizadas), utilizadas para reducir la intensidad del viento.
- Setos: Una excelente opción para amplios jardines. La única pega tal vez sería que tardan bastante en crecer y requieren mantenimiento. No obstante, permiten establecer limitaciones a la vez que protegen las plantas. Pueden ser de una única especie o de varias.
- Arbustos y plantas trepadoras: Al igual que los setos, son una buena alternativa. Su ventaja es que requieren menos mantenimiento y, dependiendo de la composición, pueden ocupar menos espacio.
- Valla y trepadoras: Las plantas trepadoras pueden aportar color y un tono vivo a las clásicas vallas de madera; sin embargo, no hay que obviar que también son sensibles a la acción de vientos fuertes y que habrá que tener cuidado.
- Láminas de brezo, mimbre o caña: Cuando se trata de balcones y jardines pequeños, son la mejor opción. Además, si se escogen, es posible moderar la porosidad según la intensidad del viento en épocas determinadas.
- Mallas de plástico: Aunque sean las últimas que mencionamos, lo cierto es que las mallas artificiales, pueden resultar muy competitivas. No sólo ofrecen buena resistencia con diversas opciones de porosidad, sino que son muy duraderas e idóneas para proteger contra el viento.
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